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Manuel García. Yo que soy Contrabandista y otras canciones...
Manuel García. Yo que soy Contrabandista y otras canciones Titulo: Yo que soy Contrabandista y otras canciones Autor: Manuel García Intérpretes: Ernesto Palacio (tenor), Juan José Chuquisengo (piano) y Juan Carlos Rivera (Guitarra). Edita: Junta de Andalucía. Consejería de Cultura Dirección Científica: Centro de Documentación Musical de Andalucía Produce: Empresa Pública de Gestión de Programas Culturales D.L. SE-233-1995 1 discos compacto: digital ; 12 cm Incluye folleto con biografía y estudio de su obra. LAS CANCIONES DE MANUEL GARCIA. Manuel del Pópolo Vicente García no es sino un gigantesco mito, un mito decimonónico en el más amplio sentido del término. Hace ciento cincuenta años se veneraba a los astros del bel canto italiano (compositores y cantantes), del sinfonismo germano o del pianismo polaco y bohemio, y era en París donde se consagraba el reconocimiento internacional. Pero en el París de 1830 se veneraba también a la música española y, en general, a todo aquello que procedía de España, al calor del romanticismo. Y París fue la ciudad que consagró al sevillano Manuel García, no sólo como cantante, sino también como compositor. París también vio nacer, en 1821, a su hija Michelle Ferdinande Pauline, conocida posteriormente como Pauline Viardot-García 21-1910). Ahijada de Giuseppe Ferdinando Paër, políglota desde la niñez, cantante, compositora, pianista y maestra de canto, la mezzo-soprano Pauline Viardot fue una de las personalidades más completas del siglo XIX. Alumna de Anton Reicha y de Franz Liszt, musa del escritor ruso Ivan Sergeyevich Turgenev o de Alfred de Musset, amiga íntima de Clara Schumann, George Sand y de Chopin, inspiradora de Gounod, Berlioz, dedicataria de Brahms o Fauré, Pauline sólo estuvo una vez en España, en 1842. Aunque ni siquiera era española de nacimiento es una de las figuras fundamentales para entender la proyección de la música española en toda Europa. Ella es la segunda protagonista de esta grabación: no en vano realizó los acompañamientos pianísticos de la colección titulada Chansons Espagnoles par Manuel García pére, paroles françaises de Mr. Louis Pomey, arrangées avec accompagnement de Piano par Mme. Pauline Viardot , publicada por Gérard en París en 1875, con motivo del centenario del nacimiento de su padre, a partir de unos manuscritos en poder de la familia García. Los títulos y los textos se publicaron en francés, lo cual llevó a Pauline Viardot a hacer algunos arreglos para adaptar las palabras francesas. Afortunadamente, se publicaron los textos y melodías originales en castellano, en folio aparte, que se han utilizado en esta grabación. En Francia, donde García publicó las canciones que figuran en esta grabación, sería considerado el "prémier ténor de toutes les Espagnes", "le Grand García", y, en fin, un "homme pittoresque". Desde el final de la Guerra de Independencia española, París y Londres (dos ciudades importantes en su trayectoria profesional) eran centros de difusión de la música española, en particular de la canción. Tras la Guerra de Independencia, los europeos no sólo se llevaron a Francia el baile del bolero, el fandango y la cachucha, sino también canciones españolas, a través de copias manuscritas que, en ocasiones, llegaron a editarse en París y en Londres. Estas obras tenían gran acogida en los salones aristocráticos y de la nueva burguesía, lo cual se evidencia, por ejemplo, en los boleros de société para piano y para canto y piano. Algunas canciones se editaban en colecciones de Aires Nacionales Españoles para canto, piano o guitarra, casi siempre a instancias de algunos músicos españoles emigrados, caso, por ejemplo, de Narciso Paz o Salvador Castro de Gistau; otras veces, fomentadas por algunos editores con agudo sentido comercial, caso de Paccini o Benoist en París. El repertorio sería difundido por músicos como Fernando Sor, Trinidad Huerta, José Melchor Gomis o el propio García. Manuel García se convirtió en uno de los apoyos de los músicos exiliados que, en los años de la monarquía de Fernando VII, llegaban en gran número a Francia e Inglaterra. Los europeos comenzaban entonces a interesarse por España no sólo a través de su literatura sino también de su música, hecho que ha sido prácticamente ignorado en los estudios sobre el romanticismo español, en su mayoría centrados en las manifestaciones literarias. En este sentido, el papel de la canción española fue muy relevante y condicionó la visión imaginativa y pintoresca que los intelectuales europeos se forjaron de nuestro país y sus manifestaciones autóctonas, personajes y actitudes ante la vida que pronto serán convertidos en clichés literarios. La canción era uno de los medios de expresión más apropiados para la consolidación del creciente pintoresquismo español. Adquisiciones: tiendas culturales de Andalucía 01.- El Riqui-Riqui 2:32 - Audio 02.- Fortunilla 3:09 - Audio 03.- Que tentación de risa 2:05 - Audio 04.- Parad avecillas 2:53 - Audio 05.- Caramba 3:06 - Audio 06.- Tirana 2:42 - Audio 07.- Bajelillo nuevo 1:56 - Audio 08.- Letrilla espñola: Las nadadoras 2:38 - Audio 09.- Cuerpo bueno, alma divina. Polo de "El Criado Fingido" 2:06 - Audio 10.- San Antón lo bendiga 1:56 - Audio 11.- Rosal 2:41 - Audio 12.- Letrilla 1:31 - Audio 13.- La Rosa 2:41 - Audio 14.- Tú, que no puedes 1:31 - Audio 15.- La flor del Zurguén 1:38 - Audio 16.- Abre el ojo, mona 2:49 - Audio 17.- Llévame a Zurguén 1:50 - Audio 18.- Serení 1:16 - Audio 19.- Floris 3:34 - Audio 20.- Y no lo digo por mal 1:27 - Audio 21.- Ay ay ay, que sí 2:35 - Audio 22.- Yo que soy contrabandista. Polo de "El poeta calculista" 2:14 - Audio 23.- Mejor es callar 2:01 - Audio VOLVER
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Manuel de Falla. El amor brujo (versión 1915). Noches en los jardines de España...
Manuel de Falla. El amor brujo (versión 1915). Noches en los jardines de España Titulo: El amor brujo (versión 1915; Noches en los jardines de España Autor: Manuel de Falla. Director: Juan Udaeta. Interpretes: Orquesta Joven de Andalucia; Esperanza Fernández, cantaora y Miguel Ángel Rodríguez Laiz, piano. Edita: Junta de Andalucía. Consejería de Cultura Dirección científica: Centro de Documentación Musical de Andalucía Produce: Empresa Pública de Gestión de Programas Culturales D.L. SE-1732-1995 1 disco compacto: digital ; 12 cm Incluye folleto con biografía y estudio de su obra. DON MANUEL ESTARÍA SATISFECHO Muy probablemente, el tiquismiquis y exigente don Manuel se encontraría hoy satisfecho al constatar lo que son capaces de hacer sus jóvenes paisanos de la Orquesta Joven de Andalucía con las dos obras que integran este disco compacto, ambas inscritas en el periodo "andalucista" del gaditano universal, creador de uno de los corpus musicales más selectos y singulares de su tiempo. Jamás debió imaginar aquel discreto Falla que desde su refugio granadino promueve y organiza en Sevilla, en 1923, la Orquesta Bética de Cámara ¿haciendo, él y su amigo Segismundo Romero, encajes de bolillo para superar mil y una adversidades¿ que exactamente cincuenta años después de su muerte, ocurrida en 1946 en el lejano exilio argentino, una entusiasta orquesta de estudiantes iba a recrear en su propia tierra El amor brujo y las Noches en los jardines de España con la plausible calidad que se refleja en esta grabación. Andalucía no es únicamente lugar de nacimiento y residencia pasajera de Manuel de Falla. Fue, sobre todo, sujeto conformador de una manera de ser y de sentir que se manifiesta no sólo en las composiciones "andaluzas" comprendidas en este compacto, sino también en la producción adscrita al conocido como "periodo castellano", en el que se hallan melodías y acentos extraídos de muy antiguos temas conocidos y recogidos por el excursionista Falla en cualquier lugar de la vasta geografÍa andaluza. En este sentido, no está de más señalar que, incluso en una pieza aparentemente tan poco andaluza como es el Concerto para clave y cinco instrumentos, se pueden distinguir ciertas melodías escuchadas durante la Semana Santa de Sevilla y que no son otras ¿como insinúa Jaime Pahissa en su particular biografÍa sobre Falla que viejas músicas procedentes de las "Capillas musicales" que aún actualmente preceden los pasos de las cofradías consideradas severas en la Semana Santa sevillana. Incluso cuando en esa misma obra evoca a Juan del Encina, Falla entronca con una tradición rítmica y armónica andaluza que arranca de los polifonistas del esplendoroso renacimiento musical sevillano. Hoy, desaparecida la Orquesta Bética de Cámara (al menos en su configuración original); cuando Andalucía está poblada de variopintas orquestas cuyos profesores proceden de los más remotos lugares; cuando los conservatorios hacen, tanto como siempre, honor a su horripilante denominación; este compacto falliano, protagonizado por una orquesta joven formada en su totalidad por estudiantes radicados en Andalucía, es la más alentadora señal de que un futuro mejor se cierne en el panorama musical de esta pródiga tierra sureña tan habituada desde siempre a sufrir el desgarro de sus más preciados símbolos. Falla, Picasso, Seneca, Juan Ramón, Machado, Lorca, Alberti... "Volveré cuando todos los españoles se pongan de acuerdo", dicen que dijo Falla en cierta ocasión. Aunque, como apunta José Bergamín, realmente "no se fue nunca de sus noches en los jardines de España". EL AMOR BRUJO (1915) En 1914, coincidiendo con el estallido de la Primera Guerra Mundial y tras los siete nutrientes años parisienses, Manuel de Falla regresa a España. Se instala en Madrid, con su familia. Cuenta 38 años y ya ha compuesto, entre otras obras, La vida breve (en Madrid, en 1905) y las pianísticas Cuatro piezas españolas (París, 1908) Falla se inserta rápidamente en la vida madrileña, estrenando en la por aquel entonces efervescente capital del Reino La vida breve (en el Teatro de la Zarzuela) y las Siete canciones populares españolas (en el Ateneo). Adquisiciones: tiendas culturales de Andalucía 01.- El amor brujo. Cuadro Primero: Introducción y escena 2:42 - Audio 02.- El amor brujo. Cuadro Primero: Canción del amor dolido 1:22 - Audio 03.- El amor brujo. Cuadro Primero: Sortilegio 1:01 - Audio 04.- El amor brujo. Cuadro Primero: Danza del fin del día 4:20 - Audio 05.- El amor brujo. Cuadro Primero: Escena (El amor vulgar) 1:08 - Audio 06.- El amor brujo. Cuadro Primero: Romance Del Pescador 2:32 - Audio 07.- El amor brujo. Cuadro Primero: Intermezzo 1:09 - Audio 08.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Introducción (El fuego fatuo) 3:43 - Audio 09.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Escena (El terror) 2:25 - Audio 10.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Danza del fuego fatuo 1:55 - Audio 11.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Interludio (Alucinaciones) 1:41 - Audio 12.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Canción del fuego fatuo 2:29 - Audio 13.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Conjuro para reconquistar el amor perdido 3:12 - Audio 14.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Escena (El amor popular) 3:12 - Audio 14.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Escena (El amor popular) 1:03 - Audio 15.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Danza y Canción De la bruja finjida 3:58 - Audio 16.- El amor brujo. Cuadro Segundo: Final (Las campanas del amanecer) 1:38 - Audio 17.- Noches en los Jardines de España: En el Generalife 10:43 - Audio 18.- Noches en los Jardines de España: Danza lejana 5:15 - Audio 19.- Noches en los Jardines de España: En los jardines de la Sierra de Córdoba 9:05 - Audio VOLVER
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